Hay grandes ventajas de ser arrogante. La vida es básicamente una profecía autocumplida de lo que creemos que podemos lograr. Una persona arrogante cree que puede hacer cualquier cosa, así que básicamente tendrán éxito donde una persona modesta tendrá menos éxito. Dejame darte un ejemplo:
2 hombres, Bill y Jim son consultores independientes que intentan que su compañía los contrate.
Bill entra y no tiene mucha confianza y le dice que “puede” ser capaz de resolver sus problemas comerciales.
Jim viene con un plan concreto sobre cómo puede ayudarlo a resolver sus problemas y tiene mucha confianza hasta el punto de ser demasiado confiado.
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Yo contrataría a Jim.
A decir verdad, el personaje de “Bill” en la vida real probablemente no haga la llamada de ventas o comience su propio negocio o solicite un trabajo que no sea un “slam dunk”. “Jim” o la persona arrogante tendría una ventaja en todo lo que es una competencia y eso es básicamente todo: carreras, relaciones, negocios, riqueza.