Es cierto que los Humanos culpan a Dios por sus propias acciones equivocadas, pero es muy natural que un hombre que cree en Dios lo culpe por tantas cosas, incluidas sus propias acciones. Los seres humanos viven en el mundo donde constantemente lo impulsan muchos conceptos erróneos, también enfrenta muchas dificultades y muchas veces comete actos erróneos que le ponen más dificultades.
El humano sabe que la vida la da Dios. Entonces, si ven más dificultades en la vida que la felicidad, naturalmente culparán a Dios por darles una vida llena de dificultades. Algunas de las razones más comunes por las que creo que los Humanos culpan a Dios por sus propias acciones incorrectas son las siguientes:
- Creencias erróneas acerca de Dios: muchos sacerdotes y líderes religiosos le han estado diciendo a la gente desde hace siglos que si adoras a Dios, él te hará prosperar, rico y feliz. Él también ignorará tus pecados. Estas viejas creencias dan falsas esperanzas de que adorar a Dios los salvará incluso si hacen algo mal. Así que siguen haciendo acciones incorrectas y luego adoran a Dios. Cuando su acción equivocada produce resultado Empieza a culpar a Dios.
- Falta de conciencia: cuando las personas hacen algo para tener placer, ignoran las posibles consecuencias de su acción. En su mayoría están impulsados por sus hábitos subconscientes, no lo hacen conscientemente. Solo esperan experimentar el placer de su acción. Cuando enfrentan consecuencias inesperadas e indirectas de sus acciones, comienzan a culpar a Dios por ignorar el hecho de que esto es el resultado de sus propias acciones erróneas.
- Incapaz de usar la energía de una manera creativa: a los humanos se les da una energía mental y física muy especial, que constantemente obliga al hombre a realizar acciones. Si el hombre no puede usar esta energía de manera creativa, entonces esta energía los llevará a usar una forma destructiva de expresarse. La gente no es consciente de esta simple ciencia de la energía y, por lo tanto, culpa a Dios por los problemas que enfrenta.
- No acepta el lado oscuro de la vida: los humanos no pueden aceptar las verdades duras de la vida. Todavía no puede aceptar el sufrimiento, y la muerte es parte natural y necesaria de la vida. Ellos creen que estos son castigos de Dios.
- Actitud errónea hacia las dificultades: las dificultades de la vida se pueden usar como una oportunidad para aprender, crecer y despertar. Pero en lugar de eso, la gente se vuelve desesperada, temerosa, triste y decepcionada. Comienzan a quejarse a Dios.
- Ego e ignorancia: los humanos se identifican separados de las existencias. Su ego y su ignorancia lo mantienen separado de su yo real. Se piensa a sí mismo como cuerpo y mente. Él no puede conocer su verdadero yo que está más allá de la vida y la muerte, los dolores y el placer y es fuente de dicha eterna. Por lo tanto, él solo experimenta insatisfacción en todas partes de la vida. Entonces, en lugar de estar agradecido a Dios por su vida, él simplemente se queja de la vida.