¿Cómo se origina el conocimiento?

Todos nosotros nacemos con una pizarra limpia en nuestro cerebro. No hay impresiones de ningún tipo. Como bebé recién nacido, ni siquiera conoce los factores del espacio-tiempo. El niño aprende lentamente mediante la operación de sus 5 órganos sensoriales el sapce, sus propias manos, sonido de piernas, color rojo, etc.
La repetición de la percepción sensorial se confirma y se convierte en una idea en el cerebro del niño y esta idea ocupa el lóbulo temporal. El lóbulo frontal aprende lentamente el sentido cívico.
El almacenamiento de tales ideas acumuladas cuando chocan entre sí da lugar a la inferencia y la imaginación de crear esos objetos y problemas que no son percibidos directamente por los sentidos, sino fuera del eje de los sentidos.
El conocimiento así obtenido está fuera de la percepción sensorial directa y también por la operación de ideas recogidas de la percepción sensorial por la práctica.
Aprendes matemáticas al principio usando tus dedos contando 1, 2, 3, 4, etc. Pero con la práctica, te convertirás en un Sakuntala Devi para obtener instantáneamente la multiplicación de 999999999X987654321.
Por lo tanto, nuestro conocimiento es por percepción sensorial directa y por conceptualización de ideas construidas por los sentidos.
En caso de una disputa entre la percepción sensorial directa y un concepto, el sentido tiene la ventaja de aceptar o rechazar el concepto.

El conocimiento inherente se origina en un buen cerebro y el resto del conocimiento se adquiere al estar interesado en obtenerlo de manera individual.