¿Por qué las necesidades básicas no pueden ser gratuitas?

Las necesidades básicas no son gratuitas, pero el costo está disminuyendo con el tiempo.

Las cuatro necesidades humanas más básicas: alimentos, ropa, combustible y refugio, se han vuelto notablemente más baratas durante los últimos dos siglos. Hace dos siglos, una persona promedio tenía que agotar todo lo que ganaba en estas necesidades básicas. Sin embargo, decir que la salud, el alojamiento o las cualidades del combustible o el nivel de vida eran demasiado pobres.

Por enorme que sea esa diferencia, en términos laborales el cambio es aún más dramático y la mejora es aún más reciente. Pregunte cuánta luz artificial puede ganar con una hora de trabajo al salario promedio. La cantidad ha aumentado de veinticuatro horas luz en 1750 aC (lámpara de aceite de sésamo) a 186 en 1800 (vela de sebo) a 4.400 en 1880 (lámpara de queroseno) a 531.000 en 1950 (bombilla incandescente) a 8.4 millones de horas luz hoy (bombilla fluorescente compacta). Dicho de otra manera, una hora de trabajo hoy le da 300 días de luz de lectura; una hora de trabajo en 1800 le valió diez minutos de luz de lectura. O déle la vuelta y pregunte cuánto tiempo tendría que trabajar para ganar una hora de luz de lectura, por ejemplo, la luz de una bombilla fluorescente compacta de 18 vatios que arde durante una hora. Hoy le habrá costado menos de medio segundo de su tiempo de trabajo si tiene el salario promedio: medio segundo de trabajo por una hora de luz

Consulte la siguiente imagen, que muestra cómo la proporción de nuestros gastos en servicios básicos se redujo durante el siglo pasado.
Al aire libre
Al aire libre
Se ha pronosticado que para 2050, la persona promedio en un país desarrollado estará empleada por menos de 30 horas por semana y esto disminuyó a 20 horas para 2100. Las horas de trabajo continuaron disminuyendo en el siglo 22 a medida que las máquinas, incluidos los androides reales, tomaron en robots cada vez más complejos y sofisticados. Para 2200, esta tendencia está completa. En la mayoría de los países, los artículos básicos como alimentos, energía y ropa serán esencialmente gratuitos, con poca o ninguna necesidad de que la persona promedio trabaje para adquirirlos.

Fuentes,

1. El racionalista optimista: cómo evoluciona la prosperidad, libro de Matt Ridley
2. http://www.futuretimeline.net/23…
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