No es un concepto científico, sino un concepto de filosofía de la ciencia que muy pocos aprecian:
Las ciencias no intentan explicar, apenas intentan interpretar, principalmente hacen modelos. Por modelo se entiende una construcción matemática que, con la adición de ciertas interpretaciones verbales, describe los fenómenos observados. La justificación de tal construcción es única y precisamente que se espera que funcione.
– John von Neumann, citado en El caos de James Gleick
Encuentro este pensamiento poético muy superior, como una expresión de la sensibilidad estética que impulsa a la ciencia, a cualquier noción burocrática de falsabilidad.
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Este pensamiento es como una cebolla. Cada vez que lo pienso, descubro otra capa de significado. Es engañosamente simple. Hasta que comiences a obtener el Zen que subyace a este pensamiento, no tienes una sensibilidad científica.
Por ejemplo, me llevó una década entender (para mi propia satisfacción) por qué “matemático” es un calificador absolutamente necesario. Muchas personas afirman que sus procesos son un ejemplo del “método científico” simplemente porque tratan con declaraciones falsificables. Esa es la visión del burócrata de la dialéctica de la ciencia. En una visión de destrucción creativa más orgánica, las matemáticas juegan un papel mucho más crítico de lo que la gente piensa, que va mucho más allá de la cuantificación y el rigor.