¿Por qué la vida lucha continuamente contra la entropía en el nivel más fundamental?

La vida sigue los mismos patrones que el Universo. Comenzamos como una única célula de huevo (gameto) que se fertiliza con una célula de esperma [esto puede equipararse con el Big Bang, cuando había una singularidad de energía oscura (huevo) que se fusionaba o estimulaba con un agujero negro de otra Universo, (esperma)], crecemos desde esta única célula a órganos, partes del cuerpo y otras complejidades, [así como el Universo se volvió complejo y se organizó en galaxias y estrellas]. El cuerpo llega a un pináculo de crecimiento físico y luego comienza a degradarse y decaer hasta que se produce la muerte [del mismo modo que el Universo llegará a un pináculo con su mayor cantidad de materia, y luego esta materia, como la destrucción de las estrellas y galaxias y su desvanecimiento hasta el Universo es frío y oscuro una vez más con solo energía oscura en él. El ciclo se repite cuando esa energía oscura se condensa nuevamente en una pequeña singularidad y es estimulada por una fuerza externa, como un agujero negro de otro Universo. En la vida respondemos a la muerte o la entropía con el nacimiento o la reproducción, el esperma del Universo es un agujero negro y las singularidades de la energía oscura son los gametos, por lo que se crean nuevos Universos todo el tiempo para evitar que ocurra una entropía “total”.

“La vida” no tiene intenciones. No tiene objetivos, ni metas, ni deseos. No tiene motivaciones, sueños, ni aspiraciones. La vida es una consecuencia de las leyes de la física en la forma en que una gota de agua se desliza por el cristal de una ventana, o la quema del sol, o la división de la luz en arco iris. Decir que la vida insiste en luchar contra la entropía es lo mismo que decir que la gravedad insiste en hacer que te sientas mal por estar gordo. Los humanos se cansan de pelear guerras interminables, porque son seres humanos, pero la existencia de la vida misma es tan insensata e incansable como la entropía, la gravedad y la existencia misma.

Porque la vida contemporánea fue moldeada por lo que ganó en el pasado y en el presente, no por lo que “gana en el final”.