La atención plena es la clave aquí. La mayoría de las personas que se preocupan, se preocupan, se estresan o reaccionan con palabras en tiempos difíciles, SABEN que no es correcto hacerlo. En el fondo, tienen conciencia de que esta no es la forma correcta de manejar la situación, pero las reacciones son todavía incontrolables.
Entonces, la brecha aquí es entre saber lo que es correcto y no poder adaptarse a él. Aquí es donde viene el control sobre la mente o la atención plena. Es solo actuar con conciencia y autocontrol lo que hará que las reacciones a una situación sean sutiles, calmadas y compuestas.
Esta atención no es algo que pueda aparecer repentinamente en una situación particular. Debe practicarse y adquirirse gradualmente durante un período de tiempo.
También la fe en Dios o cualquier poder divino ayuda a mantener la calma y luchar contra la situación. Pero eso también es el resultado de un concienzudo saadhna hacia Él, donde tomamos nuestras mentes para estar dedicados a Él en lugar de enredarnos en otras cuestiones importantes.