Si te entendí correctamente, temes que los demás te desaprueben. Te ofrezco dos ejercicios simples pero efectivos para ti, que uso para mí.
1. Imagina el peor resultado en cada situación. Vívelo en tu mente. Todo el mundo te desprecia. Tu compañero te deja. Pierdes una extremidad. Tu familia y amigos mueren. Entiende que puedes sobrevivir a todo. Sí, eres realmente tan fuerte. ¿Todavía te importa ese Joe que no cree que seas tan bueno?
2. No sé cuántos años tienes, pero supongamos que tienes 25. Tu vida probablemente terminará en no más de 60 años. Ahora, imagina: ya no estás en el momento presente: estás acostado, débil e incapaz de moverte, viejo, y entiendes que estás a punto de morir y nada puede cambiar eso. Entonces recuerda ese momento cuando tenías 25 años y te preocupabas por todo. Estoy seguro de que tendrás dos pensamientos en tu cabeza:
- Quiero volver a ese día cuando tenía 25 años y pensé que era el peor día de mi vida.
- No podría importarme menos de otros humanos. El hecho de que vivo ya es una fuente de felicidad para mí.
Cuando es tu momento, entiendes, lo poco que importa. En la vida real, tuve una experiencia cercana a la muerte dos veces, y me sentí así.