¿Podría haber una funcionalidad subyacente más amplia para la existencia de vida que no sea la perpetuación de los genes?

Cuando Jeremy England habla del “propósito” de la vida, está utilizando la metáfora para tratar de transmitir el sentido de la estructura que surge de los procesos físicos sin sentido. No está utilizando la palabra “propósito” para significar “intención”, para implicar un plan, un significado o una meta.

Comunicar los sistemas matemáticos a un público lego es una tarea difícil y, a menudo, conduce a una mala interpretación. Por ejemplo, los intentos de los físicos de explicar, a través de la analogía, las matemáticas bien definidas de la mecánica cuántica han llevado a interpretaciones espirituales sin sentido. La declaración de Einstein de que “Dios no juega a los dados con el Universo” se ha interpretado como una referencia a la existencia de Dios, en lugar de (como pretendía) una expresión metafórica de su creencia de que el Universo es inherentemente estructurado y no aleatorio.

“Propósito”: intención, planificación, significado, objetivo, requiere un planificador consciente. No hay evidencia de tal.

No es imposible. Pero no parece haber razón para suponerlo, y hasta que alguien presente alguna evidencia física, lo aprobaré. Podría postular que el universo existe únicamente para que pueda comer helado. No hay pruebas de ninguna manera, pero ¿por qué arriesgarse? ¡Chocolate belga por aquí, por favor!

Los seres humanos quieren asignar dirección y propósito, siempre que no exista. Es como somos y afecta a cómo percibimos las cosas.