Hay al menos algunos rasgos humanos que son casi seguramente el resultado de la selección sexual (es decir, rasgos que han evolucionado puramente como resultado de las preferencias sexuales, sin ningún otro beneficio de adaptación). La mayoría de estas son “características sexuales secundarias”: el dimorfismo del vello corporal y el tono de voz entre hombres y mujeres, y algunos aspectos de la forma física, como la mayor estatura y la musculatura de los hombres y las caderas y senos curvados en las mujeres, aunque las diferencias de forma física Probablemente tenga algún beneficio adaptativo también.
También es posible que otros rasgos humanos hayan sido impulsados por la selección sexual en la etapa temprana de nuestra desviación evolutiva de los otros simios. En particular, una teoría es que el desarrollo del lenguaje puede haber sido impulsado por la selección sexual, ya que los humanos primitivos tienen una preferencia por otros con un rango más amplio de vocalizaciones, y luego por el humor o la narración. Personalmente soy un poco escéptico de esta teoría, pero es indudablemente cierto que incluso hoy en día, las mujeres siempre mencionan el “buen sentido del humor” como uno de los rasgos clave que buscan en un hombre, así que presumiblemente eso debe tener algún efecto en nuestra evolución.