La vida nació de un organismo unicelular. Esa venta evoluciona hacia un organismo multicelular. En primer lugar, todas las acciones básicas, como las respiratorias, la digestión, la reproducción, etc., se llevaron a cabo en una sola venta. Pero a medida que la vida evoluciona, los seres vivos han dedicado órganos que tienen su responsabilidad respectiva.
Ahora imagine que las celdas de tamaño micro no tienen intención de evolucionar, si llegan a existir y desaparecen cuando llegó el momento o, mejor aún, si perecen antes de tiempo porque no se adaptan a su entorno. Si es así, nunca hubiéramos existido, demonios, este planeta completo sería un páramo tan sin vida como la superficie lunar.
La razón principal por la que vivimos, incluso cuando los tiempos son difíciles para nosotros, es porque esperamos un mañana mejor. Esperamos evolucionar, ser mejores seres vivos. A medida que enfrentamos desafíos en nuestra vida, tanto físicos como psicológicos, empujamos nuestros límites aún más que antes y buscamos el éxito en una nueva elección. Este sentido de logro da sentido a nuestra vida.
Entonces, ¿qué define tu existencia en este mundo?
Cada individuo tiene su propia perspectiva y ve el mundo a su manera. Cada paso en nuestra vida aprendemos a prosperar y sobrevivir. Cada paso nos trae nuevas experiencias. Cada paso nos hace una nueva persona. Este individuo se eleva a una persona única, puede decir “Único”. Cada alma es diferente. Todos los seres pueden vivir en sociedad, trabajar desinteresadamente para mejorarlo, pero al final lo único que importa es cómo vive su vida. ¿Cómo son de frente a los desafíos de la vida. Cómo influyen en las personas que los rodean. Todo esto marca la existencia de un individuo.