Comencé a hacer meditación de atención plena a los 12 años y me cambió la vida por completo y me ayudó a lidiar con mi TOC y mi ansiedad.
Cuando comencé a prestar atención unos 10 minutos diarios, luché porque pensé que no debía pensar en nada durante mi práctica de meditación. Tenía muchos pensamientos negativos bombardeando mi mente y me sentía sudorosa y tensa. Cuando traté de detener esos pensamientos, todo lo que hizo fue hacerlos más fuertes. Esto hizo que la meditación se sintiera como una experiencia desagradable al principio.
Sin embargo, aunque no podía calmar mi mente, seguí practicando 10 minutos diarios. Después de algunos meses de luchar con la meditación de atención plena, tuve suficiente y decidí buscar por qué mi meditación de atención plena no estaba funcionando para mí.
Fue entonces cuando descubrí de qué se trataba la atención plena. No se trataba de tratar de detener los pensamientos. Se trataba de centrarse en el momento presente y no prestarles atención. Todo ese tiempo me había centrado en mis pensamientos tratando de detenerlos.
- ¿Cuáles son las principales lecciones de tu vida?
- ¿Qué hizo cuando se dio cuenta de que había cometido el mayor error de su vida?
- ¿Cuál ha sido tu momento más terrible de tu vida?
- ¿Cuál es el peor consejo que le podrías dar a alguien?
- ¿Alguna vez has tomado consejos de un discurso motivador y te ha arruinado la vida?
Como dijo el filósofo británico Alan Watts en su velocidad, la primera regla para dejar de pensar es
“No lo intentes, porque si lo haces será como si alguien tratara de suavizar el agua con una plancha”.
Después de hacer ese cambio en mi meditación de atención plena, vi resultados muy positivos. Estaba mucho más tranquilo y relajado que antes. Mis amigos y familiares también lo notaron.
También estaba aprendiendo mejor y me resultaba más fácil absorber información, ya que me enfocaba más en el momento presente y ya no sentía ningún sentimiento de ansiedad o impaciencia. Como resultado, estaba menos estresado por aprender. Esto me ayudó a mejorar en mis exámenes y logré obtener todos los As.
Además, la atención plena me ha ayudado a ser menos tímido y más seguro, ya que tenía una baja autoestima y rara vez salía con mis amigos. Gracias a la atención plena, puedo conectarme más con mis amigos y no preocuparme de avergonzarme. Cada vez que tenía pensamientos negativos no necesitaba preocuparme por ellos porque eran solo pensamientos.
Hacer mindfulness también me enseñó a apreciar todos esos momentos increíbles que he tenido. Hoy estoy más centrado en el presente y he aprendido a vivir cada momento al máximo.
No dude en consultar este artículo que muestra las principales razones por las cuales las personas tienen dificultades para meditar y las formas de mejorar su experiencia de meditación.