Se volvió verde. No puedo decir negro, blanco, marrón o rojo, porque eso implicaría que una raza es mejor que la otra.
Si todos en el mundo se volvieran verdes, el mundo sería un lugar mucho mejor.
Aquí están las ventajas.
- ¿Cuáles son los momentos que te hacen llorar casi siempre?
- ¿Qué piensan los agnósticos acerca de Jesús y la vida que vivió?
- ¿Cuáles son algunos buenos libros para vivir una vida moral y ética en el mundo complicado de hoy?
- ¿Cuándo te has sentido más avergonzado? ¿Dónde estabas? ¿Será esta la primera vez que abandones al flaco? Tú compartes el tuyo y yo compartiré el mío.
- ¿Cuándo aprenderemos finalmente a vivir sin ser esclavos económicos del mismo sistema de dominación y control?
- El racismo no existiría.
- Nadie se ajustaría automáticamente a un determinado perfil.
- No más proyecciones “aleatorias” en el aeropuerto.
- Nadie sería etiquetado automáticamente como racista debido a su inclinación política.
- Nadie sería el objetivo de otra cosa que no sean las decisiones que tomaron.
- No más segregación. No más divisiones.
- Los principales medios de comunicación se verían obligados a presentar una transmisión más justa y justa frente a lo que creen que les dará la mejor calificación.
Sí, en un mundo perfecto todos seríamos verdes, y todos serían vistos como humanos.
No creo que seamos tan estéticamente agradables para una especie, pero bueno, como mi madre siempre me dijo, “Parece que no lo es todo, y probablemente también deberías trabajar en tu personalidad”.