Porque Dios creó. La teología católica clásica señala que un acto no puede ocurrir sin algo que elija, y algo que se mueva o ponga en práctica. Esto es lo que llamamos “voluntad”. Dios manifiestamente tiene esto, y por lo tanto se dice que tiene una voluntad.
La gran pregunta medieval era si el intelecto de Dios o la voluntad de Dios tienen prioridad. En general, la opinión de los teólogos escolásticos era que su intelecto debe venir primero, porque la voluntad no puede elegir o moverse a menos que sea movida por algún bien, y no podemos saber que algo es bueno excepto por nuestros intelectos.
Esta posición ha significado que el catolicismo ha mantenido durante mucho tiempo que hay límites en la acción de Dios: Dios no puede querer nada irracional o malo. Sin embargo, hay algunos otros pensadores, específicamente William de Ockham (y hasta cierto punto Duns Scotus) que afirmaron que su voluntad era primordial, y por lo tanto, ninguna ley podría restringir su acción. Algunos grupos protestantes parecen haber tomado esta actitud, especialmente el calvinismo, aunque no estoy seguro de esto.
- ¿Cómo te estás asegurando de que estás buscando el placer de Dios en todo lo que haces?
- “La verdad es subjetiva”. Qué significa eso? ¿No hay verdades universales en la vida?
- Si el futuro “ya” existe, ¿existe el libre albedrío? ¿Estamos condenados a tomar las decisiones que “ya” existen?
- ¿Ser un alto mantenimiento es algo malo?
- ¿Importa si vivimos en una simulación?