Recuerdo todo lo que me hizo llorar, reír, sonreír, sonrojarme o, en pocas palabras, tener un impacto en mi vida.
Recuerdo cómo mi papá me llevaría cuando crecí. Recuerdo pelear con mi hermana. Recuerdo a mi mamá gritándome por terminar los vegetales. Recuerdo cuantas veces yo y mis chicas iban a clases de literas para ir al cine. Recuerdo el momento exacto, vi a mi novio de la universidad y, de alguna manera, supe que me cambiaría la vida para siempre. Recuerdo cómo me hizo más fuerte de lo que era antes de conocerlo.
Recuerdo mi peor día en el trabajo. Recuerdo el día que recibí mi primer cheque de pago. Recuerdo a mi papá llorando al lado de mi cama, cuando estaba inconsciente por los días. Recuerdo cómo superé mis desilusiones. Recuerdo todas las veces, mi hermana y yo peleamos. Recuerdo que estábamos sentados tomando café, hablando de niños. Recuerdo la sonrisa en la cara de mis padres, cuando les compré los regalos. Recuerdo todas las veces que mis amigos y yo pasábamos las noches hablando, riéndonos y comiendo alimentos crudos.
Recuerdo las noches, mi hermano y yo pasamos sentados helados en el punto de Nariman. Recuerdo toda la cena que yo y mi hermana pasamos riéndonos por bromas tontas. Recuerdo todo el tiempo, pasé llorando por algunas personas que no juegan ninguna importancia en mi vida.
- ¿Cuál es tu mejor momento de todos los días?
- Anoche estuve borracho con mis amigos y no tengo recuerdos de la mitad de la noche. ¿Hay alguna manera de recordar esos recuerdos?
- ¿Cuáles son algunos de tus mejores recuerdos sentados alrededor de una fogata?
- ¿Cuál fue el momento más silencioso y más triste de tu vida?
- ¿Cuál fue tu recuerdo de infancia más preciado? ¿Por qué?
Recuerdo el día, primero hablé con mi futuro esposo, poco sabía, iba a casarme con él. Compré a mi futuro esposo en casa, y aunque al principio estaba lleno de baches, llegaron mis padres. Recuerdo todos los cumpleaños, aniversarios, o incluso celebrando pequeños momentos simples que celebramos solo porque necesitábamos alguna razón para comer pastel.
Tal vez las pequeñas cosas, los pequeños momentos … Tal vez no sean tan pequeños después de todo.
La vida tiene que ver con la colección de recuerdos, aunque algunos te harán llorar, otros te harán reír, pero definitivamente te cambiarán y te harán la persona que eres. Esos momentos son los momentos que recordarás.
Es por eso que tenemos que guardar los recuerdos, porque la vida cambia tan rápido que a veces eso es todo lo que te queda.
“Los recuerdos son la arquitectura de nuestra identidad”.