Al igual que el inglés, ¿algún otro idioma se volverá popular en todo el mundo en los próximos 50 años?

Muy poco probable – básicamente, no.

El inglés se difundió por todo el mundo, primero por el colonialismo británico en los siglos XVIII y XIX, y luego por el crecimiento de los medios masivos de comunicación internacionales y la tecnología de la comunicación en los siglos XX y XXI. Ha tenido la ventaja de llegar a la cima en un momento de la historia en el que las personas de todo el mundo se están comunicando entre sí más que nunca. Se ha convertido en lo último, la lengua franca global.

Nada cambiará esto en el corto plazo, sin importar qué tan poderosa sea China, Rusia o cualquier otro país que hable un idioma diferente. El inglés es como el nuevo latín: su dominio durará por siglos, aunque en las próximas décadas se va a homogeneizar (ya que cada vez más personas hablan una forma neutralizada e internacionalizada del mismo, cuando se comunican en línea) y, sin embargo, pueden también se fracturan en dialectos específicos del país que están ‘corrompidos’ (por falta de un término mejor) por la influencia de otros idiomas específicos del país. El inglés indio, por ejemplo, es muy distinto del inglés que hablo, siendo del Reino Unido, y esas tendencias continuarán.

Por lo tanto, el inglés cambiará mucho y ya se está convirtiendo en un idioma con un estándar internacional general, así como estándares específicos de cada país. Es por esto que la gente habla de ‘ingleses globales’. ¿Pero va a ir a algún lado pronto? No lo creo.

El mandarín está ciertamente en aumento, al igual que el japonés (si se sigue la expansión de las opciones curriculares en las escuelas intermedias urbanas). El español también ha aumentado en popularidad, junto con el francés (estos también han llegado a nuestras escuelas secundarias más rurales). El alemán se mantiene firme. Este último solía ser el segundo idioma más enseñado, pero cayó en desgracia en algún momento a lo largo del final de la Segunda Gran Guerra, pero debido a una difusión bien fundada de maestros competentes, no parece ir a ninguna parte pronto.

Aún no se sabe si alguno de estos se hará cargo del inglés como segundo idioma, pero nunca lo sabemos. El inglés también fue un cambio bastante radical (aunque quizás comprensible). Es poco probable que el inglés se disipe completamente del currículo, aunque sigue siendo una posibilidad de que experimente una caída similar de la gracia que el alemán, convirtiéndose en un tercer idioma en su lugar.

Espero que esto ayude.