Me quedé mirando la pregunta por un minuto, tratando de averiguar por qué me parecía una criatura extraña, la idea de que me interesaría una métrica de “Tengo éxito” me pareció tan poco familiar que no podía entender cómo para acercarse a ello.
No estoy muy interesado en mi éxito o fracaso personal, y ciertamente no como algo que me permita clasificarme en una de estas dos categorías. Presumiblemente, tengo éxito en algunas cosas y fracaso en otras, y si uno vive con un nivel de compromiso que continúa hasta que usted logra morir. No hay un punto ideal para agarrar una pegatina de “éxito o fracaso” y darle una palmada en la frente, creo.
Pero creo que lo que me dificulta la pregunta es que si estoy “haciendo mi trabajo”, como lo he asignado a mí mismo, tengo la garantía de fallar en una escala masiva. No hay absolutamente ninguna posibilidad de éxito, porque “éxito” en mi mundo significa la transformación de la humanidad: el fin del sufrimiento, el despertar de los perdidos y los quebrantados, la recuperación de la integridad para todos.
Eso sería ‘éxito’, y esa es la escala en la que trato de navegar la vida. Es como si uno fuera a vaciar el océano con una cucharadita, y nada menos que conseguirlo cuenta como ganar … simplemente no va a suceder, el punto es seguir trabajando en el problema porque ese es el tipo de persona que eres, no estar atado a él. El resultado como una forma de validar su valor como persona.
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Es un gran océano, y mi cucharadita no es muy impresionante. Pero estoy bastante contento de seguir sacándome.