Me alegra que hayas hecho esta pregunta y tengo una confesión que hacer.
SOY UNA HOARDER. ¡Ahí! Lo admití. Acumulo cosas que encuentro lindas, como cajas de fantasía, papel de envolver, cubiertos de plástico de cuando pido comida en línea, artículos de papelería (¡especialmente!), Recuerdos, libros, revistas, ropa, frascos de loción de lujo y más. No importaba si los usaba, tenerlos en mi vida me hacía feliz. Me sentí culpable por acaparar cosas. Me encantaría ver a Marie Kondo transformar el espacio de su cliente con su fabulosa técnica Kon Mari. ¡Todas mis cosas provocaron alegría! ¡Hola!
Me sentí avergonzado más allá de mi ingenio cuando mi novio me llamó este día. Siempre se quejaba de mi armario desbordado y amenazó con atacarlo un día. Nunca pude encontrar exactamente lo que estaba buscando y siempre tuve que deshacerme de todo y buscar cada rincón para encontrarlo. Siendo un niño del ejército, se trata de orden, disciplina y eficiencia. Me dio un ultimátum que protesté furiosamente. ¡Limpia mi armario o lo tirará todo!
Me hizo deshacerme de la mitad de mis cosas. Estaba lloriqueando delante de él. Con cada cosa que tiraba, los músculos de mi corazón se apretaban un poco más. No tenía ni la menor idea de que atribuyera tanto valor a las meras cosas. Finalmente vi algo de sentido en lo que me estaba haciendo hacer. Después de la desintoxicación del material, realmente me sentí más ligero (¡o tal vez fue por llorar tanto!)
- Le dije a mi esposa que en mi lecho de muerte, mis últimas palabras serán ‘Si hay un camino de regreso, lo encontraré’. ¿Cuáles son mis posibilidades?
- ¿No puede una persona comenzar una carrera tarde en la vida y no preocuparse de que los empleadores soliciten experiencia previa?
- ¿Qué puedo hacer con mi vida? Siento que hay mucho más que puedo lograr.
- ¿Cómo calculamos las posibilidades de vida (formas de vida similares a los animales) en exoplanetas para todo el universo?
- ¿Vives por dinero?
Me las arreglé para convencerlo de que me dejara guardar algunas cosas, pero si no las uso en 6 meses, serán basura. Ahora vivimos en lo esencial. No compramos nada de lo que no necesitamos. Para ser honesto, no echo de menos las cosas viejas. En realidad me siento despreocupado. El único punto que me vendió: cuanto más cosas tienes, más responsabilidad tienes de mantenerlas.
Ahora, todo lo que hago es awwwww en cosas y dejarlas ir. En realidad se siente un poco agradable 🙂